Buenas tardes,

hoy ha sido el día elegido. Quizás algunos de vosotros estéis eufóricos saltando por las calles con vuestros boletos premiados. A Julio y Marta les tocó la lotería el día que se conocieron. Ella entonaba un villancico precioso en el escenario y Julio la observaba desde abajo. Así comenzó la bonita historia de amor de Julio y Marta.

Marta vistió un vestido maravilloso de María Lluisa Rabell, pendientes de Tous, tocado de José María Peiró y zapatos de Paco Mena. Su ramo de novia fue de la genial Marucca. Marta deseaba un bouquet con flores súper románticas de color blanco y champagne y con sutiles toques que recordasen a la Navidad, así que Marucca decoró su ramo con pinceladas de acebo.

Julio llevó chaquet de la sastrería Derby 1951  y zapatos Lottusse. Desde el principio, Julio insistía en que deseaba algo diferente. Tras varias visitas a la sastrería nos inclinamos por un chaqué con estampado Príncipe de Gales, que iba como anillo al dedo con el vestido de Marta.

La pareja fue acompañada por cuatro damas de honor que iban guapísimas. Un look perfecto con el tipo de boda que Julio y Marta habían soñado, un estilo navideño pero rústico. Se conocieron en diciembre y este mes era especial para ellos. Predominó la madera, las piñas y las bellotas. La paleta de color fue el beige, el champagne, el oro, el verde y pequeñas pinceladas de rojo. Todo tenía que ser de cuento.

Julio y Marta se dieron su «Sí, quiero» con una ceremonia religiosa que se celebró en la Iglesia de Las Adoratrices, Sevilla. Sin duda con el mejor párroco que hemos conocido. Don Antonio hizo que una hora de ceremonia pareciesen diez minutos. Una ceremonia llena de amor y cercana a todos los que allí estábamos presentes. La Iglesia fue decorada con muchísimo gusto por Suroeste, crearon centros florales a base de paniculata y eucalipto. A Marta la paniculata le recordaba a la nieve.

El banquete se celebró en la Hacienda Al-Baraka, y de la parte gastronómica se encargó el catering Ángel Utrera.

Durante el cocktail de bienvenida, los invitados pudieron hacerse fotos en un photocall de lo más navideño, ¡incluso había nieve! Marta soñaba con que hubiese nieve en su boda, y finalmente sus hadas se encargaron de que hubiese nieve. Los invitados pudieron dejarle unos mensajes preciosos, en un escritorio antiquísimo del año 40. Para los mensajes utilizamos sobres de correo aéreo, los cuales tenían que meter los invitados en un saco que compramos en Londres. Una de las ciudades favoritas de la pareja.

La boda de Julio & Marta fue pura elegancia y creatividad. En cuanto a la decoración floral, predominó el eucalipto, el pino, el ranúnculus, el acebo, el lentisco y el algodón. Todos los centros de mesa se elaboraron con estas flores. Para las mesa de los novios, creamos una guirnalda preciosa que caía hasta el suelo a base de lentisco y eucalipto. Bajo la mesa, las letras iluminadas de XMAS. Para las mesas de los invitados, usamos unos jarrones que los propios novios habían pintado. Julio y Marta han sido unos novios increíbles. Han empleado muchísimo tiempo en su boda y han hecho todo tipo de manualidades para que luciese preciosa. Han sido casi 3 años de organización. Para las invitaciones, contaron con la ayuda de Isa Gil de Made With Lof.

El obsequio para los invitados fue perfecto: un gingerman. Una galleta riquísima de jengibre que elaboró para la pareja Ofelia Bakery.

Los novios abrieron el baile con un falso vals que terminó siendo un gran Rock&Roll. ¡Los invitados se quedaron de piedra! Durante la fiesta, Julio sorprendió a Marta con un «Flashmob» del tema «All I want for Christmas is you».

Para la barra libre, creamos dos buffets muy dulces. Un quiosco de madera con dulces navideños y un carro con chocolates. Weddings With Love se encargó de la puesta en escena y para la pastelería contó con la ayuda del hada de los dulces, Ofelia Bakery. En estos córners los invitados pudieron degustar panettones, galletas decoradas, turrones, mantecados caseros, triffles, diferentes variedades de chocolates, chocolate caliente, bastones de caramelo, churros…

De la fotografía y el vídeo de la boda se encargaron Alberto y Maru fotografía. Da gusto trabajar con este equipo. Tenemos una gran conexión. Y han tenido tantas reuniones y sesiones de fotos con Julio y Marta que el día dela boda fue todo muy fácil.

De la amenización música se encargó la empresa TCB. Ezequiel hizo a bailar a toda la boda.

Esperamos que os enamore esta boda. Nosotras estamos intentando convencer a Julio y Marta para que se casen cada 12 de diciembre.

Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo